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Significado de los celos patológicos
Celos patológicos: Cuando los celos llegan a un extremo peligroso 3 minutosÚltima actualización: 05 noviembre, 2016Todos nos sentimos celosos de vez en cuando. De hecho, es una reacción normal ante la sensación de que una relación muy apreciada se ve amenazada. Los celos sanos dicen a nuestros familiares, parejas y amigos: “Eres importante para mí y nunca querría que algo malo le ocurriera a nuestra relación”.Sin embargo, así como hay celos normales y sanos, también hay celos excesivos u obsesivos. Este trastorno se llama celos patológicos.
Test de celos patológicos
Los celos mórbidos se encuentran en la psiquiatría general, de la tercera edad y forense, y los clínicos de cada especialidad deben estar familiarizados con su reconocimiento y manejo. Además de las cuestiones clínicas, la cuestión del riesgo para el paciente y los demás ocupa un lugar destacado en la consideración de los celos mórbidos. A veces es necesaria la hospitalización, no es infrecuente el uso del ingreso obligatorio y en ocasiones se justifica el tratamiento en entornos seguros. Esta revisión aborda la naturaleza de los celos mórbidos, su psicopatología, cuestiones de diagnóstico, asociaciones, riesgos y manejo.
Los celos son una emoción común, compleja y “normal”. El Oxford English Dictionary define la palabra celoso como “sentir o mostrar resentimiento hacia una persona que uno considera rival”. Esta definición indica que la creencia en la presencia de rivalidad es la cuestión clave, y que el hecho de que esa rivalidad exista o no realmente es menos importante. Los celos dentro de una relación sexual tienen claras ventajas en términos evolutivos: un comportamiento que asegura la posesión absoluta de la pareja permite la propagación de los propios genes a expensas de los de un verdadero rival (Referencia Daly, Wilson y WeghornDaly et al, 1982). Sin embargo, cuando la creencia en la rivalidad es errónea, se puede perder mucho tiempo y esfuerzo en intentar eliminar una falsa amenaza.
Tratamiento de los celos mórbidos
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Los celos patológicos, también conocidos como celos mórbidos, síndrome de Otelo o celos delirantes, son un trastorno psicológico en el que una persona está preocupada por la idea de que su cónyuge o pareja sexual le está siendo infiel sin tener ninguna prueba real,[1] junto con un comportamiento socialmente inaceptable o anormal relacionado con estos pensamientos. Se considera un subtipo de trastorno delirante[1].
Sobrevaloración de una idea, que se define como “una idea aceptable y comprensible perseguida por el paciente más allá de los límites de la razón. La idea no se resiste y, aunque no se trata de un delirio, el paciente concede característicamente la máxima importancia a la investigación y el mantenimiento de la fidelidad de la pareja con gran desventaja personal y para la angustia de la pareja”. Las ideas sobrevaloradas se caracterizan por existir en los propios pensamientos del individuo, siendo egosintónicas; lo que significa que las ideas proyectan los comportamientos, valores y sentimientos que están alineados con los deseos y objetivos del ego del individuo, o son consistentes con la imagen ideal de sí mismo del individuo, las ideas también son susceptibles de ser razonadas pero no son resistidas[2].
Trastorno delirante
Un individuo patológicamente celoso establece sospechas sobre la infidelidad de su pareja. En cuanto se establecen las dudas, el individuo pasa a convertirse en poseedor, y comienzan a surgir los síntomas del trastorno. A los ojos de la pareja morbosamente celosa, el “otro significativo” acusado se presume culpable hasta que se encuentren pruebas de su inocencia. Sin embargo, las pruebas no se materializan, y los valientes esfuerzos por demostrar la inocencia o cuestionar la culpabilidad fracasan, ya que las preocupaciones irracionales en la mente de la pareja sospechosa no pueden refutarse racionalmente. Además, el rechazo de la infidelidad por parte de la pareja acusada podría incitar a la ira y la violencia. En determinadas circunstancias, la pareja tolerante, que se ve acosada por los repetidos interrogatorios y acusaciones de infidelidad, podría proporcionar confesiones falsas que provocarán la furia del individuo celoso.
La evaluación psicopatológica debe ir seguida de un examen del estado mental para caracterizar la forma de los celos mórbidos, para estudiar cualquier psicopatología relacionada y para estudiar la posibilidad de la existencia de un trastorno orgánico. Por último, se debe realizar una evaluación del riesgo en ambos miembros de la pareja, y se debe considerar el riesgo de cometer suicidio, los antecedentes de violencia doméstica, los antecedentes de violencia interpersonal, incluyendo cualquier tercero (por ejemplo, un presunto rival), y el riesgo sobre los hijos (si los hay).