Que produce la ansiedad

Cómo se siente la ansiedad

Es posible que haya oído que los trastornos mentales están causados por desequilibrios químicos en el cerebro, pero ¿qué significa eso exactamente? El término “desequilibrio químico” es la abreviatura del complejo equilibrio de los sistemas de neurotransmisores del cerebro necesarios para el mantenimiento de la salud mental.

Según las teorías del desequilibrio químico, los síntomas del trastorno de pánico pueden atribuirse a desequilibrios en los mensajeros químicos naturales del cerebro, conocidos como neurotransmisores. Éstos ayudan a comunicar información entre las células nerviosas del cerebro.

Se cree que el cerebro humano tiene cientos de estos tipos diferentes de neurotransmisores, y las teorías de desequilibrio químico sugieren que una persona puede ser más susceptible de desarrollar síntomas de trastorno de pánico si uno o más de estos neurotransmisores no se mantienen equilibrados.

Se cree que los neurotransmisores serotonina, dopamina, norepinefrina y ácido gamma-aminobutírico (GABA) están específicamente relacionados con los trastornos del estado de ánimo y la ansiedad.  Estos neurotransmisores se encargan de regular diversas funciones corporales y mentales.

Ansiedad social

Liam siempre había cuidado de su hermano menor, Sam. Pero cada vez que Sam cogía el autobús tarde después del entrenamiento de fútbol, Liam se preocupaba tanto por él que no podía concentrarse en sus deberes. Liam miraba el reloj, preocupándose e imaginando lo peor, imaginando accidentes de autobús y temiendo, sin ninguna razón en particular, que Sam pudiera estar herido o muerto. Sólo cuando Sam llegó a casa sano y salvo, Liam pudo finalmente relajarse.

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Es completamente normal preocuparse cuando las cosas se vuelven agitadas y complicadas. Pero si las preocupaciones se vuelven abrumadoras, puedes sentir que están dirigiendo tu vida. Si pasas una cantidad excesiva de tiempo sintiéndote preocupado o nervioso, o tienes dificultades para dormir debido a tu ansiedad, presta atención a tus pensamientos y sentimientos. Pueden ser síntomas de un problema o trastorno de ansiedad.

La ansiedad es una reacción humana natural que implica a la mente y al cuerpo. Cumple una importante función básica de supervivencia: La ansiedad es un sistema de alarma que se activa cuando una persona percibe un peligro o una amenaza.

Cuando el cuerpo y la mente reaccionan ante un peligro o una amenaza, la persona experimenta sensaciones físicas de ansiedad, como la aceleración de los latidos del corazón y la respiración, la tensión muscular, el sudor en las palmas de las manos, las náuseas y el temblor de las manos o las piernas. Estas sensaciones forman parte de la respuesta de lucha y huida del cuerpo. Están causadas por una descarga de adrenalina y otras sustancias químicas que preparan al cuerpo para huir rápidamente del peligro. Pueden ser leves o extremas.

Trastorno de ansiedad generalizada

La ansiedad es una emoción que se caracteriza por un estado desagradable de agitación interior y que incluye sentimientos subjetivamente desagradables de temor ante acontecimientos anticipados[1][2]. Suele ir acompañada de comportamientos nerviosos como ir de un lado a otro, quejas somáticas y rumiación[3].

La ansiedad es una sensación de inquietud y preocupación, generalmente generalizada y desenfocada, como reacción exagerada ante una situación que sólo se percibe subjetivamente como amenazante[4]. Suele ir acompañada de tensión muscular,[5] inquietud, fatiga, incapacidad para recuperar el aliento, opresión en la región abdominal y problemas de concentración. La ansiedad está estrechamente relacionada con el miedo, que es una respuesta a una amenaza inmediata real o percibida; la ansiedad implica la expectativa de una amenaza futura, incluido el temor[5] Las personas que se enfrentan a la ansiedad pueden retirarse de situaciones que les han provocado ansiedad en el pasado[6].

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Aunque la ansiedad es una respuesta humana normal, cuando es excesiva o persiste más allá de los periodos adecuados para el desarrollo, puede diagnosticarse como un trastorno de ansiedad. Existen múltiples formas de trastorno de ansiedad (como el Trastorno de Ansiedad Generalizada y el Trastorno Obsesivo Compulsivo) con definiciones clínicas específicas[7]. Parte de la definición de un trastorno de ansiedad, que lo distingue de la ansiedad cotidiana, es que es persistente y suele durar 6 meses o más, aunque el criterio de duración pretende ser una guía general que permite cierto grado de flexibilidad y a veces es de menor duración en los niños[5].

Ataque de ansiedad vs. ataque de pánico

La ansiedad es una reacción normal al estrés y puede ser beneficiosa en algunas situaciones. Puede alertarnos de los peligros y ayudarnos a prepararnos y prestar atención. Los trastornos de ansiedad difieren de los sentimientos normales de nerviosismo o ansiedad e implican un miedo o ansiedad excesivos. Los trastornos de ansiedad son los más comunes de los trastornos mentales y afectan a casi el 30% de los adultos en algún momento de su vida. Pero los trastornos de ansiedad son tratables y existen varios tratamientos eficaces. El tratamiento ayuda a la mayoría de las personas a llevar una vida normal y productiva.

Los trastornos de ansiedad pueden hacer que las personas traten de evitar situaciones que desencadenen o empeoren sus síntomas. El rendimiento laboral, las tareas escolares y las relaciones personales pueden verse afectadas.  En general, para que una persona sea diagnosticada con un trastorno de ansiedad, el miedo o la ansiedad deben:

El trastorno de ansiedad generalizada implica una preocupación persistente y excesiva que interfiere en las actividades diarias. Esta preocupación y tensión continuas pueden ir acompañadas de síntomas físicos, como inquietud, sensación de nerviosismo o fatiga fácil, dificultad para concentrarse, tensión muscular o problemas para dormir. A menudo las preocupaciones se centran en cosas cotidianas como las responsabilidades laborales, la salud de la familia o asuntos menores como las tareas domésticas, las reparaciones del coche o las citas.